Una de las principales bases en las que se sustentó la mafia durante sus inicios en Italia y Norteamérica era la clave de silencio, ese pacto implícito que cumplían a cabalidad todos los miembros de una organización criminal en caso de ser capturados, el cual consistía en no delatar, bajo ninguna circunstancia, a un aliado o enemigo que hiciera parte de ese mundo. Este código se mantuvo durante años, hasta que en 1963 el gangster estadounidense, Joseph Michael Valachi, decidió romperlo, al reconocer públicamente la existencia de la mafia y contar detalles y secretos que hacían parte de la misma. Joe Valachi, como lo conocían en el ámbito, nació el 22 de septiembre de 1904 en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. Creció en una humilde familia de inmigrantes italianos. Su padre era alcohólico y lo golpeaba constantemente, algo que, según el mismo Joe, influiría para que él tomara el camino de la delincuencia años más tarde. Su carrera criminal comenzó en una pequeña pandilla llamada ‘The Minutemen’, la cual se dedicaba a realizar hurtos y escapar en tan solo un minuto. Valachi era el conductor del grupo y su gran habilidad para escapar rápidamente le sirvió para ganarse la reputación de ser una estrella en ascenso en el inframundo criminal de la ciudad de Nueva York. En 1921 fue arrestado, pero salió en un par de días. En 1923 volvió a ser detenido y de igual manera, tampoco tuvo grandes complicaciones, siendo liberado tras nueve meses de prisión. Gracias a Dominick “The Gap” Petrilli, en 1930 conoció a algunos miembros de la mafia italoamericana, también conocida como la Cosa Nostra.
Pronto se convirtió en un soldado de la familia Lucchese , dirigida por Gaetano Reina. En los siguientes años, Valachi luchó al lado de Salvatore Maranzano en su guerra contra Joe Masseria. Posteriormente, Valachi se convirtió en un soldado de la familia Genovese, la cual estaba al mando de Charles “Lucky” Luciano. En julio de 1932, Valachi se casó con Carmela Reina. Durante las siguientes dos décadas permaneció en su posición de soldado en la familia Genovese hasta que fue declarado culpable de violaciones de narcóticos en 1959 y sentenciado a 15 años de prisión. Fue allí cuando Valachi decidió testificar ante un comité del Senado de los Estados Unidos. Aunque sus revelaciones nunca llevaron directamente a la condena de ningún líder de la mafia, si proporcionaron múltiples detalles sobre la historia de la mafia , operaciones y rituales. De igual manera, ayudaron en la solución de varios asesinatos no resueltos y en la identificación de muchos miembros de la organización criminal. Su testimonio fue tan importante que llegó a ser transmitido por radio y televisión, y también llegó a ser publicado en periódicos. La mafia italoamericana dejó de ser la organización invisible al público que había sido durante casi un siglo después del testimonio de Valachi. Esta fue considerada la primera evidencia concreta para las autoridades federales estadounidenses de que la mafia italoamericana de verdad existía. Tras estas declaraciones, la mafia italoamericana ofreció 100 mil dolares por la cabeza de Valachi. Este hecho fue bastante reconocido en la cultura popular, al punto en que el periodista Peter Maas publicó una biografía inspirada en esta situación llamada ‘The Valachi Papers’, la cual fue llevada a las pantallas de cine años después, protagonizada por Charles Bronson. De igual forma, las escenas que representan el interrogatorio del comité del Senado de Michael Corleone y Frank Pentangeli en la película ‘El Padrino (Parte II)’ están inspiradas en la declaración de Valachi. El nombre de Joe Valachi también fue mencionado en el capítulo 15 de la sexta temporada de la famosa serie animada de televisión, ‘Los Simpson’, titulado ‘Homie el Payaso’. Joe Valachi falleció el 3 de abril de 1971 tras sufrir un ataque al corazón mientras cumplía su condena en una prisión ubicada en Anthony, Texas. Si bien nunca se supo con certeza por qué Valachi decidió ser el primer mafioso en romper el código de silencio, algunas personas especularon que lo hizo porque creía que la mafia había arruinado su vida, mientras que otras afirmaron que simplemente realizó esta acción porque quería obtener beneficios especiales y una rebaja considerable en su condena.