Stravinski, el músico fiel a sí mismo

Ígor Stravinski nació en Oranienbaum, cerca de San Petersburgo, Rusia, el 17 de junio de 1882. Aunque su padre era un cantante estrella de la Ópera Imperial, esperaba que el niño se convirtiera en burócrata. Ígor terminó un curso universitario de derecho antes de tomar la decisión de convertirse en músico. Para entonces, era un buen pianista amateur, sesionista ocasional, un entusiasta lector de partituras no tradicionales de Francia y Alemania, y un experto en ópera italiana, francesa y rusa. El amigo más cercano de la juventud de Stravinski fue Stephan Mitusov, el hijastro de un príncipe. Mitusov tradujo los poemas del poeta francés Paul Verlaine que Stravinski puso música en 1910, y organizó el libreto de la ópera de Stravinski: The Nightingale.

Uno de los compañeros de clase de Stravinski en la universidad fue Vladimir Rimsky-Korsakov, el hijo del compositor Nikolai Rimsky-Korsakov. Stravinski se convirtió en un aprendiz del anciano Rimsky-Korsakov.

Para aprender de la mejor manera sobre el trabajo artesanal de Rimsky-Korsakov, Stravinski ocultó su gusto personal, confiando en que podría ejercerlo más tarde. Su Sinfonía en E-flat (1905-1907), Pastorale (1907) y Fireworks (1908) son una demostración de esto. Stravinski también escribió una pieza funeraria para Rimsky-Korsakov, que luego recordó como la mejor de sus primeras obras. En su momento esta pieza no fue publicada, y luego el manuscrito se extravió. Asique permanece inédita.

El gran empresario (y patrocinador de espectáculos) Sergei Diaghilev escuchó las obras de Stravinski en San Petersburgo y lo invitó a París, a escribir arreglos orquestales de las obras de Chopin para los ballets en los que era productor. Los ballets fueron únicos y rápidamente se convirtieron en clásicos. Las tres producciones: Firebird (1910), Petrushka (1911) y The Rite of Spring (1912-1913) hicieron que la influencia de Stravinski en todas las artes fuera enorme. Lo establecieron como líder de una generación musical heroica junto a compositores anteriores como Maurice Ravel y Arnold Schoenberg. La Primera Guerra Mundial impidió que Stravinski escribiera más obras para la compañía de Diaghilev y la Revolución rusa impidió que Stravinski volviera a casa desde París. Durante la guerra vivió en Suiza, donde colaboró con el poeta C. F. Ramuz en una serie de obras basadas en el folclore, entre ellas El cuento del soldado (1918). Este trabajo influyó profundamente en Bertolt Brecht, Jean Cocteau y otros dramaturgos de la década de 1920. Otro ballet, iniciado en 1914 y finalmente orquestado en 1923, fue el mayor logro de estos años: Svadebka (La pequeña boda).

Una breve ópera cómica, Mavra (1922), reveló un nuevo lirismo (personal, emocional) en el complicado desarrollo de Stravinski. Aunque no fue un éxito popular, para gran decepción de Stravinski, influyó en jóvenes compositores como Darius Milhaud, Francis Poulenc, Kurt Weill, Sergei Prokofiev y Dmitri Shostakovich.

La Sinfonía de los Salmos (1930) para coro y orquesta sin violines se convirtió en la más conocida de todas las obras de Stravinski después de The Rite of Spring. Las obras teatrales Persephone (1934) y A Game of Cards (1936) fueron tan únicas como la Sinfonía de los Salmos. Stravinski también escribió obras instrumentales a gran escala: el Concierto para violín (1931), Dúo para violín y piano (1932), Concierto para dos pianos (1935), Concierto para orquesta de cámara (“Dumbarton Oaks”, 1938) y Sinfonía en C (1940).

Cuando Stravinski se estableció en los Estados Unidos en 1939, renovó su interés por la música popular. Compuso varias piezas cortas, incluyendo Ebony Concerto (1946) para la banda de Woody Herman. Comenzó varios proyectos para música de cine, aunque ninguno fue concretado. Luego encontró partenaire en el New York City Ballet bajo la dirección de George Balanchine (1904-1983). El primer fruto de esta colaboración fue Orfeo (1948). En 1948, Stravinski realizó una ópera de larga duración, The Rake’s Progress.

El joven director Robert Craft se convirtió en el ayudante de Stravinski mientras trabajaba en la ópera, y le presentó a Stravinski la obra de Anton Webern. Durante la década de 1950, Stravinski estudió a Webern y gradualmente absorbió nuevos elementos en su propio estilo. Esto queda evidenciado en la Cantata sobre poemas ingleses medievales (1952), El Septeto (1953), Canción (1954) con cánones en la memoria de Dylan Thomas (1914-1953), el oratorio Canticum Sacrum (1956) en honor a San Marcos, y el ballet Agon (1953-1957). Las obras de Stravinski de la década de 1960 continuaron demostrando ritmos y sonidos complejos, así como una armonía y un contrapunto fascinantes. De esta época podemos nombrar a Threni, es decir, Lamentaciones de Jeremías (1958), Un sermón, una narrativa y una oración (1961), El diluvio (1962), Abraham e Isaac (1963), Requiem Canticles (1966), The Dove Descending Breaks the Air (1962), y la canción para voz y piano sobre el poema de Edward Lear, El búho y el gatito (1968). Las últimas obras instrumentales importantes de Stravinski fueron Movements for piano and orchestra (1959) y Variations for orchestra (1964), ambas interpretadas en ballets por Balanchine. Stravinski murió en Nueva York el 6 de abril de 1971 a los de 88 años y fue enterrado en Venecia en el cementerio de la isla de San Michele. Su tumba está cerca de la de su antiguo colaborador Diáguilev. La vida de Stravinski abarcó la mayor parte del siglo XX, incluyendo muchos estilos de música clásica moderna, influenciando a muchos compositores durante su vida y después de su muerte.

Stravinskygrave.jpg

 

 

 

 

 

 

Ultimos Artículos

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

TE PUEDE INTERESAR

    SUSCRIBITE AL
    NEWSLETTER