La noche de los cuchillos largos, Hitler elimina a sus enemigos

Hitler consolida su poder realizando una purga de los sectores más radicales del partido. La primera masacre perpetrada por los nazis liquida a su principal rival dentro del nacionalsocialismo, Ernst Röhm, jefe del cuerpo paramilitar SA, homosexual reconocido.

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Ernst Röhm, llegó a ser la mano derecha del Hitler

Ernst Röhm, llegó a ser la mano derecha del Hitler

En 1933 los nazis se hacen con el poder tras realizar un pacto con las viejas élites. Hasta entonces la SA (Sturmabteilung) era la organización paramilitar más importante dentro del partido nacionalsocialista. Un año después Ernst Röhm, su líder, había logrado incrementar las filas de sus militantes, que habían pasado a ser más de 3 millones, y pese a las reservas del ejército, continuaba siendo una organización armada. La llegada al poder de los nazis perturbó a Röhm que acusó al partido de haber llegado a un acuerdo con las fuerzas tradicionales, empezando por el ejército, y a la propugnación de una ‘segunda revolución’ que acabase con todo vestigio del antiguo imperio guillermino y de la República de Weimar.

Röhm pretendía convertir las SA en un batallón de milicianos que absorbiese al viejo ejército. Y que al tiempo, desplazase a las élites financieras y empresariales, no sólo las de origen judío. Su programa político desaprobaba además los pactos que Hitler había cerrado con el ejército y los principales círculos empresariales.

El canciller de Alemania, Adolf Hitler decidió entonces tomar cartas en el asunto, Röhm debía desaparecer tras ser identificado como una amenaza por su actitud combativa. La ‘Operación colibrí’ se haría cargo del asunto. Se iniciaba una de las primeras acciones maquiavélicas hitlerianas de las que haría gala a lo largo de su trayectoria política. La noche del 30 al 1 de julio se procedió al arresto y asesinato de Röhm y sus colaboradores más cercanos, alegando la conjuración de un golpe de estado inminente.

nazis

La propaganda nacionalsocialista justificaría los hechos incluso tras la muerte de Röhm, homosexual reconocido.

El partido radicalizaría la persecución del colectivo gay tras su ejecución. La ideología nazi propugnaba la perpetuación de la raza aria, aportación vedada por razones obvias a los homosexuales.

Sea como fuere, obedeciendo a la batuta de Hitler, la lucha interna en el partido nacionalsindicalista fue un paso más en la ruta del poder del nacionalsocialismo.

¿Qué hubiese ocurrido si la ‘Operación colibrí’ hubiese fracasado?

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