Antonia Nava nació el 18 de noviembre de 1779 en Tixtla, Guerrero. Fue una militar independentista y una de las heroínas cuyo rostro ha quedado en el anonimato. Estuvo casada con el insurgente Nicolás Catalán, con quien combatió junto a José María Morelos y Pavón.
Sus padres fueron Nicolás Nava y María Celestina. Antonia y Nicolás probablemente se casaron en Tepecoacuilco a finales del siglo XVIII. Inicialmente vivieron en Tixtla, para luego mudarse a la ciudad de Chilpancingo. Después, tras un conflicto familiar, cambiaron de residencia a Jaleaca, donde procrearon ocho hijos.
Cuando estalló la Guerra de Independencia en 1810, Antonia Nava y Nicolás Catalán viajaron para encontrarse con Morelos en el cerro del Veladero. Ambos tenían la edad de 30 años.
Muerte de Manuel Catalán
El 13 de septiembre de 1813 Morelos instauró el Primer Congreso de Anahuác. En el acto de celebración el Antonia y Nicolás ofrecieron una comida para los insurgentes y el pueblo. Tras ello, Morelos se dirigió a Valladolid y dejó la custodia del Congreso que se dirigía a Tlacotepec a Víctor y Miguel Bravo. Durante el avance fueron alcanzados por los españoles de Gabriel Armijo. El 14 de enero trabaron combate en Paso de Mezcala, resultando victoriosos los españoles. El Congreso logró escapar y continuar su avance, Antonia y su esposo fungían como escoltas. Por la noche, cuando regresaron al campo de batalla, encontraron entre los caídos a Manuel, hijo de Antonia y Nicolás.
En febrero de 1817, el general Nicolás Bravo y su lugarteniente Nicolás Catalán se vieron obligados a fortificarse en el Cerro del Campo, donde nuevamente fueron sitiados por Armijo. Después de 50 días de resistencia, se vieron diezmados y derrotados moralmente. Padeciendo hambre y sed, combatían a diario hasta el límite.
Antonia Nava se ofrece para ser comida por los insurgentes
Para alimentarse, Nicolas Bravo decidió que se matara a uno de cada diez soldados, el encargado de ejecutarlos sería Catalán. Como respuesta, Antonia Nava, su cuñada María Catalán Catalán y Catalina Gonzáles Bautista, se ofrecieron a ser sacrificadas, pues consideraban injusto el martirio de los soldados. Sobre este dramático episodio Luis Obregón menciona:
“El general Bravo hizo un esfuerzo supremo. Sacrificando sus sentimientos humanitarios que siempre lo distinguieron, mandó diezmar a sus soldados para que comiesen los demás. La orden iba a cumplirse cuando doña Antonia Nava y doña Catalina González, seguidas de un grupo de numerosas mujeres, se presentaron al general y con varonil actitud le dijo la primera:
«Venimos porque hemos hallado la manera de ser útiles a nuestra Patria. ¡No podemos pelear, pero podemos servir de alimento! He aquí nuestros cuerpos que pueden repartirse como ración a los soldados».”
Tras sus palabras, Antonia Nava sacó un puñal y lo llevó a su pecho. Los soldados impidieron que se suicidara. Aplaudida por su heroísmo, Nava y las otras mujeres rompieron el cerco por la mañana y combatieron a los españoles con machetes y palos.
Muerte del segundo hijo del matrimonio insurgente
En noviembre de 1818 Vicente Guerrero puso a Nicolas Catalán y a Pedro Ascencio a cargo de la toma de Coyuca, Guerrero. En aquella misión falleció Nicolás Catalán Nava, hijo del matrimonio insurgente. Cuando Antonia se encontró con José María Morelos y Pavón se negó a aceptar cualquier tipo de consuelo y dijo que no estaba ahí para llorar, sino para entregar a sus hijos como soldados. Actualmente el pueblo se llama Coyuca de Catalán, en honor del joven Nicolás.
Durante la firma del Plan de Iguala proclamado por Agustín de Iturbide, doña Antonia Nava y dos de sus hijos estuvieron presentes. El 27 de septiembre de 1821 participó en la entrada triunfal del Ejército Trigarante a la Ciudad de México montada a caballo, la acompañaban sus cuñadas Dolores y María Catalán. Posteriormente Nicolás fue designado comandante del estado de Guerrero. Antonia Nava falleció el 19 de marzo de 1843 a los 63 años.
TEXTO EXTRAÍDO DEL SITIO: https://www.mexicodesconocido.com.mx/antonia-nava-una-insurgente-desconocida-que-lucho-por-la-independencia-de-mexico.html