Clara Rockmore nació en Vilna (Lituania) el 9 de marzo de 1911 bajo el nombre de Clara Reisenberg y murió en New York (EEUU) el 10 de mayo de 1998. Fue una virtuosa de la música clásica que se destacó como intérprete de theremín.
Clara heredó la capacidad musical de su familia de músicos y para cuando tenía 2 años ya sacaba melodías en el piano y para los 4 fue aceptada como la estudiante más joven del Conservatorio Imperial de San Petersburgo. Un año más tarde, era la alumna más premiada del afamado compositor y director de orquesta Leopold Auer (1845-1930).
Debido a la Revolución Rusa, la familia Reisenberg, tuvo que migrar a los Estados Unidos. El día de su debut como violinista en su nueva tierra sintió su mano izquierda entumecerse y no pudo tocar nunca más… hasta que, en 1928, a sus 17 años, conoció a Leon Theremin (una americanización de Leon Termen, como era conocido en Rusia), el inventor del primer instrumento electrónico del mundo.
Ese fue un nuevo comienzo en la vida y carrera de Clara. Sin haber recibido ninguna noción de cómo interpretar el theremín, Clara logró elaborar su propio método de ejecución, llegando a alcanzar un grado de fusión con el instrumento reservado solo a pianistas o violinistas. A partir de ese momento, centró todos sus esfuerzos en conseguir llevar el theremín a la altura de cualquier instrumento clásico.
¿Qué es el theremín?… El theremín es el único instrumento que se toca “sin tocarlo” y que se controla desde el espacio ya que es capaz de producir sonidos sin que exista contacto físico entre el aparato y el intérprete. Theremin construyó un dispositivo electrónico con dos circuitos que crean un campo electromagnético capaz de producir sonidos gracias al movimiento de las manos en el aire al invadir dichos espacios.
A pesar de tratarse de uno de los instrumentos más difíciles de tocar ya que no tiene referencias en las que afinarlo, Clara Rockmore logró dominarlo a la perfección y abrir el camino para convertirlo en el pionero de la música moderna.