Golpe de Estado petrolero

En marzo de 1951, el asesinato del general Haj Ali Razmara, primer ministro iraní, marcó el inicio de un período turbulento que finalizaría dos años más tarde con la intervención de los Estados Unidos. El sha de Irán, Muhammad Reza Pahlevi, había nombrado primer ministro a Razmara hacía apenas seis meses bajo la presión de Washington, que esperaba que Razmara, un general derechista, fuera capaz de imponer el orden contra las fuerzas nacionalistas y el partido comunista Tudeh. Sin embargo, Razmara no era una persona popular y menos aún apreciada por la población, y fue asesinado por un miembro del grupo Fadayan-e Islam, un grupo chiíta fundamentalista (cuándo no) de fuerte presencia activista en la política iraní.

Asesinado Razmara, la presión popular obligó al sha a nombrar en su reemplazo como primer ministro a un nacionalista: Mohammad Mosaddeq (también puede escribirse Mossadegh), que era diputado por Teherán y había sido presidente del Comité del Petróleo. Mosaddeq fue reelegido como primer ministro en 1952, esta vez ganando las elecciones.

Mosaddeq lideró una iniciativa (que ya había iniciado antes de la muerte de Razmara), que llegó al Parlamento, para nacionalizar la compañía petrolera Anglo-Iranian Oil Company (AIOC), empresa de propiedad británica. Irán sólo recibía una mínima parte de los beneficios de la AIOC, en una época en la que otros países petroleros se quedaban con el 50% del producto para disponer libremente del mismo; además, la compañía no contemplaba la participación de ningún iraní en cargos de importancia dentro de la misma.

La nacionalización de la compañía fue aprobada por el Parlamento rápidamente. Sin dar muchas vueltas, Mosaddeq conminó a los empleados británicos de esa empresa a dejar el país en un plazo de una semana.

Ante esta medida, los británicos buscaron asfixiar a Irán económicamente restringiendo al máximo sus compras de petróleo, cerrando dos bancos británicos y exigiendo la devolución de una deuda millonaria en libras y de los créditos otorgados a los comerciantes iraníes. Hasta amenazó con enviar a la Armada. Por su parte, la compañía petrolera británica sacó de la circulación su capital y obviamente frenó las inversiones.

En el plano político internacional, Gran Bretaña impugnó la nacionalización del petróleo iraní ante la Corte Internacional de La Haya y ante el Consejo de Seguridad de la ONU. Mosaddeq no se amilanó y defendió ante el Consejo de Seguridad los derechos de Irán sobre su petróleo. Esto llevó a la indefinición del Consejo de de Seguridad hasta esperar la decisión del tribunal de La Haya, que en julio de 1952 finalmente se pronunció (es un decir) resolviendo que “no tenía competencia para entender en ese conflicto”. O sea, los dos organismos dijeron “ni”. Esto fue recibido en Irán como un triunfo, y fue atribuido a la gestión de Mosaddeq.

Mohammad Mosaddeq.jpeg

 

 

Pero el bloqueo económico de Gran Bretaña generó en Irán una esperable crisis, a la que Mosaddeq respondió con discursos sensibleros y lacrimógenos pero reafirmando su decisión de nacionalizar el petróleo. A la vez pidió al Parlamento facultades para realizar profundas transformaciones en muchos campos, las cuales fueron implementadas por medio de unas 80 leyes sobre seguridad, corrupción, justicia, presupuesto nacional, vivienda, salud, fuerzas armadas, justicia social y libertades civiles. Algunas de estas medidas fueron consideradas autoritarias por parte de la población, pero fueron aprobadas por ley. También nacionalizó el servicio telefónico y la actividad pesquera, que se encontraba entonces concesionada a… la Unión Soviética.

Ante las peticiones de ayuda de Londres para anular la nacionalización, en un principio Estados Unidos no hizo nada más que fomentar e impulsar negociaciones (que fracasaron) y apoyar oficialmente el boicot al petróleo iraní, restringiendo su compra. La administración de Truman (demócrata) había oscilado entre la lealtad a Gran Bretaña y el apoyo a la autodeterminación iraní. Pero en las elecciones de fines de 1952 fue electo presidente de EEUU Dwight Eisenhower (republicano), quien no quería saber nada con que Mosaddeq se acercara al comunismo y temía que lo introdujera en Irán.

Mosaddeq no quería en realidad el intervencionismo soviético (de hecho les había quitado las concesiones pesqueras), pero tampoco quería al sha Reza Pahlevi, un liberal de buena relación con los británicos. Sin embargo, cuando la crisis económica provocada en gran parte por el boicot de Gran Bretaña hundió la economía de Irán y su propia coalición nacionalista empezó a tambalear, reafirmó métodos y medidas dictatoriales y buscó el apoyo del partido comunista Tudeh. Ante ese panorama, Dwight Eisenhower y el primer ministro británico Winston Churchill decidieron que era el momento de actuar.

A finales de 1952, agentes del MI6 británico se acercaron a sus colegas de la recién fundada CIA con la propuesta de sacar a Mosaddeq del poder por la fuerza. La CIA aceptó (frotándose las manos). El 18 de agosto de 1953 la agencia norteamericana ejecutó, con el apoyo de la británica, la Operación Ajax, como se llamó al golpe de Estado con el que fue derrocado Mosaddeq.

EOP9rgaX0AA_uZb.jpeg

 

 

 

Las piezas clave de la operación, que ambos gobiernos mantuvieron en secreto, fueron el secretario de Estado estadounidense John Foster Dulles, el director de la CIA Allen Dulles (hermano del anterior) y Kermit Roosevelt, también de la CIA e hijo de Theodore Roosevelt.

El golpe empezó mal: el sha destituyó a Mosaddeq, pero éste no quiso abandonar su cargo. Los seguidores de Mosaddeq se rebelaron, el clima se puso más que denso y el sha huyó a Roma. La CIA contrató mercenarios y organizó un alzamiento militar. Durante una semana hubo disturbios callejeros y rebeliones, hasta que finalmente Mosaddeq fue detenido y el sha regresó. Esa semana murieron trescientos iraníaes.

El 21 de diciembre de 1953, Mosaddeq fue condenado a cumplir tres años de reclusión en aislamiento en una prisión militar, muy por debajo de la sentencia de muerte impuesta por los fiscales. Ahora todos parecían estar en contra de Mosaddeq…

La petrolera AIOC se reorganizó en 1954 y pasó a llamarse British Petroleum; se convirtió en una empresa en la que ya había iraníes en sus cargos. ¡Ah! Y se generaron varias concesiones a empresas petroleras norteamericanas.

Si no… ¿para qué están los amigos?

Ultimos Artículos

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

TE PUEDE INTERESAR

    SUSCRIBITE AL
    NEWSLETTER