A modo de revisionismo histórico, nos hemos percatado que algunos diarios locales de Córdoba han equivocado al comentar que sólo hay restos arqueológicos jesuíticos en la calle Duarte Quirós N° 175 (colindando con el Colegio Monserrat) de la ciudad de Córdoba, en donde actualmente hay un local llamado “Mármol Siglo 17”, sin embargo debemos comentar que existen más restos arqueológicos situados a lo largo de la calle Quirós.
Actualmente el sitio en donde se emplaza la Compañía de Jesús en Córdoba, estaba destinada para “Convento de monjas o recogimiento de doncellas” en 1577, sin embargo nunca la ocuparon pero en 1599 los jesuitas recibieron la manzana para que allí funcionase la casa de los jesuitas: “En la ciudad de Córdoba en veinte días del mes de marzo…” el Cabildo “le hace entrega la quadra” y allí construyeron su iglesia y dependencias, constituyéndose el centro de sus actividades misionales y educativas. Al año siguiente los padres ya habían ocupado la manzana contigua que daba al sur para su ranchería y esclavos pues había sido una donación a los religiosos por parte del matrimonio Juan Álvarez de Astudillo y Lucía de Granados, el 6 de junio de 1600 según legajos del Archivo Histórico Provincial de Córdoba – AHPC. De este modo ambas manzanas que se hallaban separadas por una calle, quedaron unidas.
Tras la expulsión de los jesuitas en 1767, la administración pasó a la Junta de Temporalidades quien gestionó la manzana jesuítica de Córdoba que comprendía la iglesia, Noviciado, dos patios y una gran huerta hacia el norte, mientras que al sur -interpuesta la calle hoy Duarte Quirós- se hallaba la segunda manzana que comprendía un tercer patio más pequeño y gran “patio de obraje”, en donde había habitaciones para esclavos y trabajadores además de varias panaderías y la ranchería para animales. No pasó mucho tiempo cuando el capellán de la Real Casa de Niñas Huérfanas Nobles o Colegio de Nobles Educandas creado en 1782 (ciudad de Córdoba), Miguel del Moral pidió al Rey utilizar el tercer patio y patio de obraje para uso de las huérfanas. Dicho pedido fue aprobado el 10 de agosto de 1806, siendo la concesión presentada por el administrador general de las Temporalidades del Virreinato del Río de la Plata; según documento resguardado en el Archivo General de la Nación Argentina.
En tanto y años luego, en 1813 se realizaba la Asamblea General Constituyente, en donde ocurrieron muchas reformas políticas y sociales como la libertad de vientres es decir la libertad de esclavos aunque pocos respetaron aquella reforma ya que no había una constitución que asentara el derecho como obligatorio en todo el territorio; no obstante recién el 1 de mayo de 1853 se incorporaba en la nueva Constitución Nacional; con ello los esclavos que daban sustento a la manzana jesuítica dejaron de existir, poco a poco se volvió dificultoso controlar toda la manzana, los cambios políticos y la crisis que atravesaban los jesuitas desde hacía años por sus deudas y el poco recibimiento de alumnos, obligaron reformar todos sus edificios que comprendían dos lotes.
En el mencionado año de 1853, el rector del Monserrat Eduardi Ramírez de Arellano debió entregar formalmente al gobierno provincial la manzana contigua (del lado sur) con la intención de realizar la apertura de una calle para volver al trazado original de 1577.
Por medio de un decreto provincial del 13 de julio de 1854, se le encargó al Jefe de Policía la tarea de realizar la apertura de la calle pues se consideraba que debían respetarse los trazados de las calles y no dar privilegios a ninguna entidad religiosa o política que ocupara dos manzanas de forma continua. No obstante el plan no se realizó por encontrarse con negativas de la orden jesuítica, franciscana y otras personas de la política; por ello aquellas tierras que debían expropiarse para trazar la calle, no se realizó… pasaron dos décadas cuando Domingo Sarmiento asume la presidencia, autorizando nuevamente la apertura de la calle que colindaba con el Colegio Monserrat por medio de un decreto fechado el 13 de enero de 1872. La presión política obligó a dar comienzo el trámite para que las tierras que incluía un patio y ranchería pasaran a manos de la provincia; Finalmente el 13 de enero de 1875 las tierras son expropiadas y por medio de una resolución del 28 de octubre del mismo año, se contrató a la empresa Hnos. Quinteros por el monto de $ 6.169 para demoler y construir la calle (ver plano “CALLE PROYECTADA correspondiente a la Manzana Jesuítica de Córdoba”), así mismo el gobierno provincial -en el mismo año- expropió tierras para la construcción de vías para ferrocarriles y otros inmuebles para nuevas construcciones según libros sobre “Compilación de leyes, decretos…”.
Muchos dan por entender que la empresa demolió todos los cuartos que formaban parte del patio “del obraje”, sin embargo dejaron en pie casi todos (que dan frente al Colegio Monserrat) como aposentos, panaderías y almacenes pues no obstaculizaron el paso del peatón (vereda). No obstante muchos cuartos que habían sido salvados por la picota, fueron finalmente demolidos por los nuevos propietarios que habían adquirido sus parcelas para construir las viviendas, otras personas se percataron del valor histórico y conservaron aquellos antiguos muros pero quedaron escondidas por nuevas construcciones.
No todo fue demolido, como hemos comentado anteriormente, revisando documentos y planos de época, nos percatamos que aquel cuarto ubicado en el local “Mármol Siglo 17” correspondía a un antiguo corredor de bóveda cruzada con lunetos y hornacina que conectaba con el patio y ranchería, mientras debajo de ella se halla una cripta (con bóveda demolida) en donde se guardaban vino, comida y materia prima por ser un lugar fresco pero existe otra cripta con bóveda ubicada en el “Virreinato Hotel Boutique” (en el mismo predio) y que esta correspondía a un cuarto en donde funcionaba una almacén. Los sucesivos dueños conservaron las criptas y cuartos pero en un rincón de la cripta del hotel, fue cercenada y tapiada posiblemente para poder seguir construyendo por encima y que no colapsara por el peso. De todos modos, debemos aclarar que tampoco se hallaron restos humanos o de un posible pasadizo secreto como se supo comentar por ahí…
Recientemente, de hecho el 27 de abril de 2022 se inauguró el Centro Cultural de la Universidad Nacional de Córdoba, “Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía”; un espacio largamente esperado desde hacía un poco más de una década pero pospuesto por razones políticas y económicas, un tema encubierto que nadie quiere comentar por la cantidad de dinero invertido en par de oportunidades. Allí, se rescataron restos arqueológicos de época colonial y de sucesivos siglos. Córdoba atesora muchos restos arqueológicos de época colonial aunque muchos de ellos se hallan aún escondidos por nuevos edificios y cocheras.